La verdad es que con este pueblillo no he acertado mucho...igual también porque después de ver Oposto, será difícil superarlo....
Bueno, el caso es que cogí el tren y me planté allí en una hora o así. Lonli lo describía como la Venecia de Portugal...en fin, ahí me has fallado... Es verdad que había un canal por el medio de la ciudad con "gondolas" o barcas de colores, vamos. Pero era todo demasiado nuevo, no tenía mucho encanto. Y según el de la oficina de turismo (que por cierto, era como un robot que se sabía la lección de memoria...) pues sólo había unas cuantas iglesias para ver... Vamos, que pasando del pueblillo.
Es verdad, y hay que ser justas, que las casitas tenían su encanto, pero creo que como cualquier otro pueblito pesquero de por aquí...
Era tan poco atractivo que creo que ni saqué fotos....Bueno, alguna del canal para al menos, decir que estuve allí...
Me rayé un poco así que me volví prontito a Oporto de nuevo. Estaba cansada así que me fui a tomar un café el el café (valga la redundancia) más famoso y más lujoso de la ciudad. Era impresionante y hasta tocaban el piano en vivo. Así que me tomé un café y un té también mientras me leía un librillo de runas que he comprado en la FNAC. Aquí puedo hacer este tipo de cosas porque, qué más da que la peña piense que soy una freaky, jiji, si no me van a volver a ver nunca!
Por el camino me fui fijando en todos esos detalles que siempre pasamos por alto. ¿Sabéis que en Oporto todavía quedan lustradores de zapatos en las calles?? Bueno, no sé cómo se llaman, son los viejitos estos que te limpian los zapatos en la calle...
Estuve un ratito largo y luego me volví al albergue pronto porque era la última noche así que me apetecía estar un ratito allí..Estuvimos un rato largo hablando y bebiendo Oporto (claro, era lo que tocaba allí ... y luego algunos se fueron de fiesta. Yo me quedé, que había buen rollito y luego a la cama para madrugar al día siguiente....
Bueno, el caso es que cogí el tren y me planté allí en una hora o así. Lonli lo describía como la Venecia de Portugal...en fin, ahí me has fallado... Es verdad que había un canal por el medio de la ciudad con "gondolas" o barcas de colores, vamos. Pero era todo demasiado nuevo, no tenía mucho encanto. Y según el de la oficina de turismo (que por cierto, era como un robot que se sabía la lección de memoria...) pues sólo había unas cuantas iglesias para ver... Vamos, que pasando del pueblillo.
Es verdad, y hay que ser justas, que las casitas tenían su encanto, pero creo que como cualquier otro pueblito pesquero de por aquí...
Era tan poco atractivo que creo que ni saqué fotos....Bueno, alguna del canal para al menos, decir que estuve allí...
Me rayé un poco así que me volví prontito a Oporto de nuevo. Estaba cansada así que me fui a tomar un café el el café (valga la redundancia) más famoso y más lujoso de la ciudad. Era impresionante y hasta tocaban el piano en vivo. Así que me tomé un café y un té también mientras me leía un librillo de runas que he comprado en la FNAC. Aquí puedo hacer este tipo de cosas porque, qué más da que la peña piense que soy una freaky, jiji, si no me van a volver a ver nunca!
Por el camino me fui fijando en todos esos detalles que siempre pasamos por alto. ¿Sabéis que en Oporto todavía quedan lustradores de zapatos en las calles?? Bueno, no sé cómo se llaman, son los viejitos estos que te limpian los zapatos en la calle...
Estuve un ratito largo y luego me volví al albergue pronto porque era la última noche así que me apetecía estar un ratito allí..Estuvimos un rato largo hablando y bebiendo Oporto (claro, era lo que tocaba allí ... y luego algunos se fueron de fiesta. Yo me quedé, que había buen rollito y luego a la cama para madrugar al día siguiente....
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