sábado, 5 de septiembre de 2009

ALEGATO FINAL

¿Por qué Portugal? Fui a tientas pero mi intuición suele ser buena y suele acertar bastante, a pesar de toda la oposición que me encontré...

Si tuviera que definir Portugal con cuatro adjetivos escogería: viejo, tradicional, melancólico y rico

Viejo porque aquí, todo lo que tiene encanto es viejo. Incluso reformando los lugares, han consevado en todo momento la majestuosidad de los edificios. Podrá sonar rimbombante pero es que de verdad que no encuentro una palabra mejor. Los edificios son majestuosos. Las mansiones e incluso las casas, mantienen sus formas antiguas, todas recubiertas de azulejos, en parte por decoración, en parte por protección.

Tradicional porque aún quedan ancianos que reviven cada día las viejas costumbre para la supervivencia. Cepillan los zapatos a los señoras en las calles, las señoras (y sólo las señoras) salen a la calle directamente a buscar inquilinos para sus habitaciones libres, las abuelas venden cacahuetes en la plaza y en los barrios pobres, aún recogen agua de las fuentes porque no tienen en sus casas.

Melancólico. Basta con mirar los semblantes de los portugueses para experimentar la sensación de tristeza que hay en sus ojos. Realmente no creo que sean infelices o que estén tristes. Dentro de toda su riqueza cultural y tradicional no pueden ser infelices. Claro está que también hay gente muy pobre, gente que de verdad necesita ayuda (y no hablo de los jetas que he tenido el placer de encontrarme yo...) y eso contrasta mucho con la opulencia que parece que tienen las ciudades. Digo que parece porque realmente no podemos hablar de Portugal como un país rico, desde luego....

Rico en cultura e historia, así como España. De hecho, comparten un mismo periodo de la historia y también sobrevivió a una dictadura. Por todos lados, quedan edificios, fuentes, parques, que cuentan y poquito de la historia y leyenda de Portugal.

Según vas subiendo al norte, vuelven todos los olores y sensaciones de años atrás: los eucaliptos; el olor del río Miño (y no hace falta llegar hasta él); la gravilla de los parques con los columpios de metal; las tiendas inmensas con grandes mostradores y huelen exactamente igual que en Galicia!

Y no sé qué más contaros de mi viaje. Hoy se acaba.

Creo que ha sido el único cuaderno de viaje que he terminado y la experiencia ha sido maja...No será el último, y el próximo será sobre Turquía no?

Besos a todas y todos !!

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